El museo tiene tres apartados: La colección de relojes que durante años hizo el artesano de la villa, en Josep Bofill Ribas; las excavaciones arqueológicas realizadas en el Castillo de Espasens, antigua edificación hoy en ruinas situado junto a la ermita románica de Santa Caterina Espasens y finalmente, uno de los hechos geológicos más inéditos e interesantes: la zona nombrada "Playa de Espolla", dónde pasa un hecho hidrogeológico muy interesante, consistente en la formación de una laguna intermitente, que aparece cuando los acuíferos del paraje van sobrados de agua. El hecho más curioso, es el desarrollo de “triops canriformis" un crustáceo de agua dulce, que muere cuando las aguas desaparecen, volviendo a nacer cuando estas reaparecen, pese a que haya pasado mucho tiempo, debido a los huevos sepultos en el lodo.